En la villa de Valdeverdeja se vienen realizando todos los años lo que se ha dado en llamar "Mayos" que como su propio nombre indica se trata de unos muñecotes ficticios en representación de oficios y quehaceres de la leyenda popular de antaño. Aunque estamos en agosto y no viene a cuento el tema, lo cierto es se lo debía a los arriba retratados, que querían verse en internet desde tiempo ha.
Hay un grupo de ciudadanas y ciudadanos, moradores ellos del barrio de la Ermita, que actividad que se organiza, actividad que participan. Como derrochan ilusión y buen hacer, pues aquí los tienes que cuando no ganan un premio ganan otro, o si no dos. La verdad es que no les conviene participar, porque les perjudica a la salud. No es que los concursos de los mayos o engalanar las calles sea en sí perjudicial para la tercera edad, en absoluto. Lo que es perjudicial es el premio. El Ayuntamiento con su buena intención dota de unos magníficos lotes de embutidos para los ganadores de los mencionados concursos, sin tener en cuenta que la tercera edad tiene el colesterol inquieto. Para próximos concursos es mas que conveniente agasajar a los ganadores con algunas verduras y no tanto embutido, porque nos quedamos sin su participación, y esto es un lujo que no nos podemos permitir en un pueblo que abunda en peñas apáticas y anticolaboracionistas. Aprendan los jóvenes de los mayores, a los que es de ley dotar de más protagonismo en las fiestas de la confraternidad.
Esta es la escena que presentaron los muchachos del barrio de la Ermita, en honor al centenario del Quijote. Los abuelos posan orgullosos para la foto, no puntúan para el premio.
Típica matanza de antaño, nada que ver con los embutidos Cruz de hoy en dia.
La tercera edad tomando el sol en una tarde primaveral. Van abrigados porque los yayos tienen frio hasta en agosto.
Las lavanderas de hace tiempo ya.
DONDE HAY ANCIANOS SED SABIOS EN PALABRAS
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